Drape es un clásico probado por el tiempo. Este material denso y cálido protege del mal tiempo y luce genial. La gente aprendió a hacerlo hace varios cientos de años, pero hoy sigue siendo igual de popular.
La palabra "drape" nos llegó desde Francia (del francés drap - "tela"). El material consta de varias capas, mientras que la parte frontal, a diferencia de la parte trasera, parece más presentable, para ello se selecciona lana de alta calidad.
Se cree que la tela para cortinas es una de las variedades de tela que se fabricaban en Rusia ya en los siglos XV y XVI. Sin embargo, en ese momento ni siquiera escucharon la palabra "cortina", por lo que sería incorrecto decir que era lo que producían.
Francia es considerada la cuna del drapeado real. Durante la Revolución Industrial (a finales del siglo XVIII) aparecieron los primeros telares en los que se inició la producción de este tejido de lana. Fue apreciado no sólo por los franceses, sino también por los ciudadanos de otros países europeos y luego por el mundo entero.
Si en aquellos días era un material completamente natural, hoy, para mejorar su calidad, se añaden a la cortina sintéticos en pequeñas cantidades.
La tela se crea tejiendo varias capas de hilos de lana y presionando posteriormente con un aparato especial. El material terminado mantiene bien su forma, no se arruga, no se estira y no se cubre con bolitas desagradables.
Hoy en día, prácticamente no se producen cortinas en su forma pura. Se le añade una cierta cantidad de sintéticos. Entonces, si la proporción de materiales artificiales en la composición no excede el 15%, entonces el tejido se considera lana, si es del 15% al 70%, media lana.
La cortina tiene las siguientes propiedades:
Sin embargo, entre todo este esplendor hay una “mosca en el ungüento”. El drapeado es un material pesado, por lo que un abrigo hecho con él no será ingrávido.
La tecnología de fabricación de dicho tejido tiene sus propios matices. Por ejemplo, el tejido de hilos de lana o el patrón pueden ser diferentes. Dependiendo de esta característica, la cortina se divide en varios tipos:
El ámbito de aplicación de la cortina no se limita a la costura de prendas exteriores y sombreros.Hoy en día, también son populares otros elementos de vestuario elaborados con él: chalecos, faldas, pantalones, chaquetas.
Además, las alfombras hechas con cortinas quedan muy bien y los juguetes hechos con esta suave lana agradarán tanto a niños como a adultos.
La producción de material de tapicería y ciertos tipos de ropa de trabajo tampoco puede prescindir del uso de cortinas. Pero en la fabricación de estos artículos se utiliza con mayor frecuencia un tejido de mezcla de lana, que contiene al menos un 60-70% de materiales sintéticos. Gracias a esto, la calidad del tejido aumenta aún más.