Recientemente han aparecido experimentos con cortes asimétricos en las colecciones de varios diseñadores de fama mundial. Y a mitad de temporada, la tendencia pasó a primer plano. Hoy hablaré de toda su diversidad y de cómo llevar correctamente vestidos asimétricos en el verano de 2020.
Desafío a lo familiar
Los diseñadores de moda se divirtieron muchísimo experimentando con ropa nueva. No sólo han cambiado los dobladillos o escotes, sino también las combinaciones de materiales, complementos y formas. A veces, las chicas de los desfiles de moda parecen estar envueltas en una colcha de retazos: un vestido puede ser muy heterogéneo.
Tomemos, por ejemplo, el modelo perfumado de la última colección de Sacai. Combina rayas gráficas monocromáticas sobre seda, organza negra y tejido plisado. No todas las chicas se probarán esto solas. Las prendas de estructura compleja tienen un gran inconveniente: son bastante difíciles de combinar con el resto de tu guardarropa. La imagen se sobrecarga fácilmente. Afortunadamente, esta ropa es al menos poco exigente para la figura del usuario.
¿A quién le quedaría bien un vestido asimétrico?
El corte suele basarse en siluetas de corte A, vendaje o trapecio. La principal ventaja de estos vestidos es que enmascaran bien las imperfecciones y corrigen la figura. Además, la edad tampoco juega un papel especial.
Los vestidos de noche brillantes son una gran opción para las jóvenes amantes de la moda. Y cualquier mujer mayor de 40 años brillará con un cóctel estricto, lacónico y elementos exquisitos... El principal problema aquí es la selección de complementos, zapatos y ropa de abrigo.
Con que ponerse
Un corte complejo requiere un mínimo de decoraciones adicionales. Está lleno de detalles. Si un vestido asimétrico consta de un corsé y un dobladillo suelto y irregular, se puede complementar con un collar minimalista o varias cadenas alrededor del cuello. En otros casos, es mejor limitarse a unos pendientes, un par de anillos o pulseras. Esto se aplica principalmente a los estilos con hombros abiertos.
Los zapatos deben seleccionarse según el mismo principio que los accesorios: cuanto más simples, mejor. Un vestido de estilo clásico quedará bien con un tacón alto y fino. Bueno, los vestidos de verano de gasa combinan perfectamente con las sandalias hechas al estilo de Bottega Veneta. O con sandalias de hebillas finas.
La bolsa suele ser pequeña. Un clásico del género es un bolso de mano, complementado con una cadena discreta o una correa decorativa. Un “sobre” también funcionaría bien. Un vestido asimétrico también se puede "caminar" con un pastillero o un bolso de "boxeo". Dependiendo del color y el material, estos accesorios pueden crear un look tanto casual como de noche.
Los estilos más populares de la temporada.
La principal tendencia del verano 2020 es un vestido toga asimétrico, confeccionado en estilo antiguo con hombros abiertos.Requiere cortinas y una tira fina que sujete la tela a la cintura.
Otro conjunto popular es un vestido lencero, complementado con una chaqueta deliberadamente pesada de corte masculino.
Este verano también son muy populares los volantes voluminosos que enfatizan el hombro descubierto. También son comunes los recortes asimétricos en la cintura y las caderas.