Los maniquíes se utilizan activamente en diversos campos de actividad. Son necesarios no solo para quienes cosen ropa. Se utilizan activamente en el comercio, demostrando los bienes disponibles. Para lo que sea que los necesites, no tienes que comprarlos en la tienda, sino hacerlos tú mismo.
Una parte importante de cualquier maniquí es el stand. Gracias a ello se mantendrá estable, te resultará más cómodo probarte la ropa, etc. Se diferencian principalmente por los materiales utilizados para ello.
Hacer una postura
Cuando hayas hecho tu maniquí, o más bien su parte superior, déjalo a un lado y trabaja en la parte inferior. El stand es bastante sencillo de hacer. Generalmente se utilizan medios improvisados. Se puede hacer de las siguientes maneras:
- Haz una cruz, igual que en los árboles de Navidad. Compra un mango de pala en una ferretería. Tome una percha innecesaria y córtele el gancho. Ahora todas estas partes simplemente deberían combinarse en un solo todo. Es decir, inserte el mango en la cruz.Asegúrate de asegurar bien cada elemento para que el soporte no se deshaga y sea más fuerte. El travesaño se puede sustituir por madera contrachapada normal. Se hace un agujero en él y se fija el corte en él;
Puedes usar solo una percha y un tubo para crear soporte. Si resulta que las perchas son demasiado grandes, primero corte todo el exceso. A continuación, sus bordes deben fijarse con cinta adhesiva a un trozo de gomaespuma. Puedes ajustar de forma independiente la altura del maniquí ajustando las perchas y el tubo;
- Una excelente opción como soporte es una pata de una silla de oficina. No sólo se puede girar, sino que también es bastante estable. Es mejor si el diámetro de la pata coincide con el tamaño de la tubería, de lo contrario tendrás que sellar la junta. Para ajustar la altura, debes medir tu altura. Empiece a hacer esto desde la séptima vértebra cervical hasta abajo. De los datos obtenidos se resta la altura de la pata hasta la marca donde se conecta con la base de la tubería. Es esta diferencia la que debes poner en el maniquí a partir de la séptima vértebra. Si queda algún sobrante de la tubería, córtalo.
Necesitarás un mínimo de tiempo y materiales disponibles. Es mejor elegir para esto una pata de silla de oficina, que sea la más adecuada para un soporte. Lo primero que importa es la fiabilidad del diseño. Para facilitar el montaje, el maniquí debe ser estable.